Dios te quiere... y necesita dinero

...o al menos eso afirmaba George Carlin, uno de los humoristas más inteligentes y corrosivos de los últimos treinta años:



La imagen de la derecha pertenece a un arresto por supuesta obscenidad, a principios de los 70, tras la interpretación de su monólogo "Siete palabras que no pueden decirse en televisión" (el tribunal decidió finalmente que su material humorístico no era obsceno, aunque sí "indecente").

De todos modos, no era la primera vez que pisaba una comisaría: al parecer, también fue arrestado el día en que detuvieron a Lenny Bruce, cuando se enfrentó a la policía que estaba exigiendo al público, del que él formaba parte, que se identificara.


Busquen, busquen, y si encuentran algo mejor... pues me lo digan, por favor.


Actualización (un par de horas después): para recordar al viejo George he estado mirando algunos de los vídeos del enlace de ahí arriba (que no es más que la página de búsqueda de Youtube para "george carlin"), y he podido volver a ver uno de sus mejores chistes. Aquí, justo al final.

Actualización (el día siguiente): supongo que los lectores de este blog, gente bien informada sin duda, están al tanto de que el motivo de esta entrada es el reciente fallecimiento de George Carlin. No sé si mi subconsciente, consternado por tal pérdida, hizo que mis dedos omitieran el dato, pero lo cierto es que, como ya puede verse en su página personal, George Carlin murió anteayer, y ése era el motivo de la entrada.

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